El término “burnout” comenzó a utilizarse entre los años 1961 y 1970, se refiere al desgaste emocional y físico que se relacionan directamente al estrés laboral. ¿Te checa?
Traducido se puede interpretar como: “Síndrome del trabajador quemado o Síndrome de desgaste profesional” pero ¿a qué nos referimos con este término?
El síndrome de Burnout o Síndrome de Desgaste Profesional, se puede definir como una serie de factores que desencadenan el desequilibrio emocional de una persona como: estrés crónico, agotamiento emocional, despersonalización (falta de concentración), y disminución del desempeño laboral.
El estrés crónico puede lucir como agobio, preocupación y agotamiento en exceso, es decir, el estrés es una reacción del cuerpo a una situación, por ejemplo, cuando estamos en peligro o en una competencia; sin embargo, cuando se presenta en mayor medida es contra productivo, ya que puede imposibilitarnos a concluir una actividad e incluso dañar nuestra salud.
Por otro lado, el agotamiento emocional se identifica cuando una persona “siente que no puede más”, es un cúmulo de situaciones, no solo laborales, que pueden originar depresión, enfermedades físicas y afectar directamente el desarrollo de las actividades diarias de una persona.
La despersonalización se puede ver de las siguientes maneras: problemas de concentración, tener pensamientos intrusivos (ideas que parecen estar atascadas en nuestra mente y nos causan malestar), ansiedad en el trabajo, pensar constantemente en la posibilidad de perder el control de una situación o hasta nuestro empleo.
Tal vez te sientas identificada o identificado con alguno de los puntos anteriores, y hasta cierto punto puede ser normal, sin embargo y, aunque no siempre está en nuestras manos controlar la ola de emociones que llegan cuando tenemos alguna crisis, ya que estamos bajo una constante de “trabajo bajo presión”, actividades para “ayer”, la exigencia de “para eso te pago” o el “ponerse la camiseta”; es importante y sano tratar de identificar cuando tenemos alguna de las alertas anteriores. Poco a poco irás conociendo tu reacción a cada situación, mientras tanto, te comparto un par de cosas que me han ayudado a sobrellevar el estrés laboral:
- Detente un par de minutos y respira profundamente
- Toma agua o come un dulce, si está en tus posibilidades
- Ordena tus actividades dando prioridad a las tareas que requieren atención inmediata, y enfócate completamente a cada una, dejando a un lado el resto hasta que la concluyas
- Anota en una libreta, agenda o una hoja de papel, cómo te sientes, después escribe una frase que te inspire y te levante el ánimo, también ayuda si lo haces al final del día, o la semana No es una fórmula, toma lo que te sirva y encuentra tu propio proceso.
Por otro lado, nuestro contexto nos ha enseñado a que “ponerse la camiseta” es sinónimo de éxito, pero cada vez pasamos más horas en nuestro lugar de trabajo y menos horas de calidad de vida, en gran parte de los casos, con un salario que apenas cubre las necesidades básicas, siendo esto otro factor que se suma al estrés y ansiedad. Razón por la cual el sector público debería garantizar accesibilidad al cuidado de la salud mental, así como el cumplimiento de La Ley Federal del Trabajo por parte de los empleadores.
Por último, sé amable contigo mismo y con tus compañeros, el ámbito laboral ya es demasiado duro, sobre todo si vas comenzando.
Te recomendamos el siguiente artículo sobre el Burnout:
El Burnout es oficialmente una emfermedad de trabajo reconocida por la OMS: https://www.eleconomista.com.mx/capitalhumano/El-burnout-es-oficialmente-una-enfermedad-de-trabajo-reconocida-por-la-OMS-20220104-0056.html