Seguramente alguna vez en tu vida has escuchado sobre la importancia de ahorrar o tal vez tus padres te hablaron un poco de este tema en algún punto. La realidad es que pocas veces nos enseñan a tener un verdadero enfoque y plantearnos metas y objetivos en nuestra vida financiara.
¿Ahorrar?, ¿Para qué?
Lo primero que tenemos que tener claro es que ahorrar significa renunciar a una cantidad determinada de dinero en nuestro presente para poder gastarlo en un futuro con el objetivo de recibir algún beneficio. Lo primordial de todo esto es saber por qué vamos a ahorrar y cuál será ese posible beneficio que podamos recibir. En general, existen tres cosas en las que se recomienda ahorrar en nuestras vidas: nuestros objetivos, para emergencias y para nuestro retiro.
1. Ahorra para cumplir tus objetivos personales y profesionales.
Todos y cada uno de nosotros tenemos planes para nuestras vidas, desde lo profesional hasta lo personal, desde adquirir una buena educación, crecer profesionalmente en nuestro trabajo, comprar una nueva computadora, un video juego, ir de viaje y conocer las maravillas del mundo, así como hacernos de nuestro propio patrimonio (casa, auto, muebles, etc.). Cada uno de nosotros tenemos el deseo de cumplir todos estos objetivos y seguramente ir por más y mejorar nuestro nivel de vida.
Estas ideas suenan muy bien y van a depender de nuestros gustos y estilo de vida por lo que ahorrar puede ayudarnos a alcanzar estos objetivos en un periodo de tiempo. Pero, muchas veces cometemos el error de enfocarnos solo en ahorrar para este tipo de objetivos personales dejando de lado dos importantes rubros que deberíamos de considerar sí o sí.
2. Ahorrar para las emergencias.
El futuro es incierto, nunca tendremos ningún tipo de seguridad de lo que podrá pasarnos ni los riesgos que podemos correr. Ante esto, una de las pocas cosas que podemos hacer es tratar de disminuir el riesgo en caso de que nos ocurra algo que nos perjudique. ¿Cómo lo podemos hacer?, una de las mejores herramientas es la prevención mediante el ahorro o en otras palabras tener un “colchoncito” para cubrir los gastos generados por emergencias.
Un fondo de emergencias (como su nombre lo dice) es el ahorro destinado exclusivamente para cubrir gastos por contingencias (gastos hospitalarios, desastres naturales, incendios, etc.). Se recomienda que un buen fondo de emergencias debe estar compuesto por lo menos seis meses de gastos fijos, es una herramienta que se tiene que construir poco a poco por lo que es importante destinar parte de nuestro ingreso para construir nuestro fondo y estar prevenidos ante el futuro incierto.
3. Ahorrar para tú retiro.
Finalmente, una de las cosas que siempre dejamos al último es ahorrar para nuestro yo del futuro. Esto se debe muchas veces a la percepción del tiempo y lo distante que parece estar de nuestro presente el día que tengamos que descansar y pasar los días más tranquilos.
Ahorrar para nuestro retiro debería ser de las cosas más importantes de considerar durante nuestra juventud ya que es precisamente la mejor etapa en que podemos construir un patrimonio y hacerlo crecer. Para lograr esto existen diversos mecanismos y en México se encuentran las AFORES que se encargan de administrar y hacer crecer nuestros ahorros. En caso de no contar con un AFORE, también se puede contar con un Plan Personal para el Retiro (PPR) que son planes diseñados a la medida de cada uno de nosotros.
Después de conocer toda esta información, puedes empezar a diversificar tu ahorro y a ponerte metas para cumplir cada uno de los rubros que mencionamos anteriormente.